Enviar. Ya está.
Acabo de enviar mi vídeo
para el casting de reporteros de ese programa de LaSexta “Sé lo que hicisteis…”
Siempre me ha gustado el programa, y cuando me enteré de que había un casting
para una nueva reportera no me lo pensé dos veces.
Ahora es cuando empiezan las
dudas… ¿Qué hago yo en el Selo, con todos esos grandes? ¿Si me cogen, estaré a
la altura? Todas esas dudas me carcomían la cabeza, pero bueno, como dicen: lo
hecho, hecho está.
Me llamo Cristina Pedroche
Navas, aunque todos me llaman Cris. Suelen decir que estoy ‘’en la flor de la
vida’’, por eso de los veinte, pero mi vida empieza a ser aburrida…
De casa a la uni, de la uni
a casa… Tardes estudiando, y de vez en cuando salir a tomar un café con alguien…
Desde pequeñita me ha
gustado cantar aunque lo hago fatal, todo hay que decirlo.
Mis padres siempre me han
dicho que tengo que hacer lo que realmente me gusta en la vida, y cuando les
conté que quería hacer el casting para “Se lo que hicisteis” se alegraron mucho
por mí, aunque yo en el fondo sabía que no les hacía gracia la idea de que si
me cogían en el programa dejara de lado los estudios para dedicarme
completamente a la pequeña pantalla, la cual, realmente, nunca sabes qué te va
a deparar.
A los pocos días de
presentar mi casting me enteré de que había más de mil participantes, y mis
esperanzas cada vez eran más pequeñas.
Todo cambió cuando a las
tres semanas, más o menos, me llamaron de la redacción del programa para
decirme que estaba entre las tres finalistas. Me alegré muchísimo, igual que
todos mis amigos y mis padres, pero empecé a tener miedo.
Las otras dos chicas ya
habían hecho pequeños cameos en televisión y yo era muy joven y sin
experiencia.
-
Cristina hija,
sólo tienes que ser tú misma y ya verás como te cogen. ¡Si eres la mejor!
-
Ya… eso me lo
dices porque eres mi madre…-Estaba muerta de nervios-
-
Que no cielo, te
digo yo que no… Ya verás como todo va genial. Además, le he dicho a Miguel que
vaya después a recogerte. –Mi madre esbozó una de esas sonrisas llenas de
confianza, pero no me gustó su última frase-
-
¿A Miguel? Vamos
mamá… Sabes que no le soporto… -Agaché la mirada a mis pies-
Tras discutir un poco con mi
madre por el tema de Miguel, me fui rumbo al que sería el principio de los
mejores días de mi vida.
Miguel es un chico que me
parecía majo al principio, salimos unos tres meses y me agobiaba mucho. Siempre
quería saber donde estaba y a donde iba, era muy controlador.
Un día se presentó en mi
casa diciendo que era mi novio. Yo no quería presentárselo a mis padres tan
rápido, ya que llevábamos muy poco tiempo juntos, y que hiciera eso me molestó
bastante.
Se ganó a mi madre con
sonrisas y regalos, y me ganó a mí con falsas promesas.
Creo que desde que lo dejé
con Miguel no creo en el amor, no merece la pena.
Como he dicho antes, Miguel
me agobiaba terriblemente y decidí cortar por lo sano esa relación, pero él no
pensó lo mismo. Cuando le dejé se enfadó muchísimo y me dijo aquello de “a mí no me deja nadie”.
A los dos días de dejarle
fui al cine con mi mejor amiga Irene, y cuando ella me dejó en casa Miguel
estaba en el portal esperándome. Me metió en su coche y me llevó a su casa.
Allí me dio una última
oportunidad de volver con él y me dijo que si no lo hacía iba a arrepentirme,
pero no dí mi brazo a torcer y le dije que no quería hacerlo. Él se encargó de
lo de mi brazo, por así decirlo. Cerró la puerta con llave y me agarró con
fuerza diciéndome que si no era suya no sería de nadie. Intentó abusar de mí,
pero conseguí salir de aquella casa a tiempo.
Cuando salí de allí lo
primero que hice fue ir a casa de Irene llorando, ya que no quería que mi madre
me viera así. Ella sigue pensando que lo dejamos simplemente porque no nos
entendíamos, no le conté la historia para que no se preocupara. La única que lo
sabe todo es Irene, y su novio.
Recordando todo esto llegué
a Globomedia con mi coche.
“Vamos Cris, céntrate, es la
oportunidad de tu vida. Pon la mejor de tus sonrisas y olvida a ese capullo”.
Necesitaba estar tranquila,
así que le envié un whatsapp a Miguel: “espero
que no te atrevas a venir a por mí. Mi madre no sabe nada de lo que pasó, pero
a mí no se me ha olvidado y no se me va a olvidar”. Al los pocos segundos
obtuve su respuesta: “me muero de ganas
de verte, Cristi ;)”.
Pff, estaba harta de este
tío, y odiaba que me llamaran Cristi.
Entré a la redacción y al
decirles mi nombre me dijeron que Patricia Conde me esperaba en el camerino
número 4. Estaba muerta de nervios… ¿La gran Patricia Conde esperándome a mí?
Ni en mi mejor sueño.
vamos a ver... primer capítulo y ya odio a Miguel de por vida! de que va intentando abusar de Cris?
ResponderEliminarno parece no medio normal!!
pero menos mal que ella ya tiene claro que no quiere saber nada de él! ganas por saber como se integra al selo y sobretodo ganas de saber como conoce a Dani y se enamora de él...
me encanta el cap y deseo el siguiente ya!!
te quiero preciosa!
Querida anonima,no tan anonima,queria decirte que no entiendo porque no querias mostrar esto,porque realmente es fantastico,me encanta como escribes y me ha hecho mucha ilusión ver una novela tuya...
ResponderEliminar¡Te quiero y espero el segundo pronto!
Ayyyyyy mis niñas, me encanta que os guste, jo <3
ResponderEliminarsubiré el otro mañana, que ya lo tengo escrito... queda poquito para que conozca a dani ;)
os quiero!!!