Ya era sábado y teníamos que volver a Madrid a medio
día, así que nos esforzamos en aprovechar bien la mañana.
Desayunamos de nuevo en la terraza, y cuando
recogimos todo decidimos bajar al jardín.
-¿Seguro que no es peligroso? –pregunté antes de
bajar-.
-Sí, Cris. Hay lobos, y bichos, nos van a comer…
-retrocedí y se rió tirando de mí- No seas tonta, que aquí el único que te va a
comer soy yo.
-Cómo aprovechas… -Me pegó a él y me besó el cuello
dejando pequeños mordiscos-.
Bajamos y comenzamos a andar por el césped. Desde ahí
era todo aún más bonito, pero cada vez que Dani empezaba a andar hacia el lado
del pozo yo le tiraba un poco del brazo para que fuéramos hacia el otro lado. Y
cómo no, empezó a picarme…
-Te da miedo…
-No me da miedo, pero quiero ir por ahí.
-Te da miedo y lo sabes.
-Que no me da miedo. –Miré el pozo y me crucé de
brazos-.
-Que sí. –Le pegué un empujón y seguí andando hacia
el lago-.
-Que te den, Daniel. –No tardé en sentir sus manos
rodeando mi cintura y sonreí un poco. Me susurró al oído-.
-Miedica… -Me estremecí y sonrió en mi oreja-.
-Sabes que si no fuera eso uno de mis puntos débiles
te pegaría ahora mismo…
-Ya, pero qué pena, porque conozco todos y cada uno
de tus puntos débiles. ¿O no? –Siguió susurrándome y cerré los ojos
asintiendo-.
-Eres imbécil… -Me giró poniéndose en frente de mí y
sonrió mordiéndose el labio-.
-¿Ah sí?
-Sí.
-¿Cuánto? –Me agarró de la cintura fuerte y evité
sonreír-.
-Mucho. –Giré la cara evitando un beso-.
-Eh, deja que te bese, tonta.
-No, no… -Puse una sonrisa pícara y me separé de él
un deshaciéndome de sus brazos-.
Se acerca a mí y yo me voy alejando conforme él da
pasos hacia delante, me río y empiezo a correr, pero me alcanza levantando mis
pies del suelo y caemos sobre el césped. Me río, ya sin fuerzas, y me giro para
mirar a Dani a los ojos. Se apoya sobre un brazo y pone su mano en mi barriga.
Siento un escalofrío. Sonrío y se acerca a mis labios para besarme muy
despacio. Comienza a bajar sus besos desde mi boca hasta mi cuello y le agarro
de la camisa para que se coloque encima de mí. Lo hace y le acaricio el pelo de
la nuca cerrando los ojos. Se separa un poco y se ríe.
-Para que luego digas que no quieres que te bese, eh
Pedroche…
-Calla, imbécil. –Le pego suave en el brazo y me
sonrojo-.
-Ah, ¿pero que sigo siendo un imbécil? Entonces mejor
me voy. –Va a levantarse pero le agarro del brazo-.
-No te vayas… Que eres un imbécil, pero eres mi
imbécil. –Puse cara de niña buena y me mordió suave el labio sonriendo-.
-Te quiero, ¿lo sabes?
-Sí… -Respondo con voz dulce y acaricio mi nariz con
la suya sonriendo-. Y yo a ti, mucho, mucho, mucho.
Sonríe y vuelve a bajar sus besos a mi cuello,
siguiendo ese camino que sabe que me vuelve loca. Cierro los ojos de nuevo y
mis manos se pierden en su pelo. Se acomoda encima de mí cuando le dejo hueco
entre mis piernas y su mano se cuela por debajo de mi camiseta. La sube
lentamente y va a parar debajo de mi sujetador. Sonrío arqueando la espalda
pidiéndole más pero cuando va a quitarme la camiseta le freno. Saca la cabeza
de mi cuello y yo intento hablar normal.
-Dani, ¿aquí…?
-No hay nadie.
-Ya, pero no sé…
-Lo único que yo sé es que te apetece tanto como a
mí. –Sonrío al escucharle y asiento un poco con la cabeza, gesto que le sobra
para volver a atacar-.
Sube a mis labios y nos besamos apasionadamente hasta
que me gira para quedar encima de él. Y allí, en el jardín de esa casa perdida
en medio de la nada, nos desnudamos poco a poco, besando todas las partes del
cuerpo del otro y disfrutándonos como dos locos. Me hace suya y yo le hago mío
una de tantas veces más.
Aiii.... que cap mas dhsajkdhasdkjshadksah :)
ResponderEliminarEllos y su forma tan particular que tienen para picarse, besarse, quererse, me encanta tu historia, como bajan al cesped, los piques de Dani hacia ella porque la de miedo el pozo y cuando la dice "si Cris, esque hay lobos y nos van a comer" ha sido muy real para venir de ellos...
luego que se sepa todos sus puntos debiles, que la haga algo y que ella se estremezca es lo mas ñoño que pueda haber en el mundo, ñoño como ellos, vamos, perfectos...
Y ahora que se ponen salidorros y le da por hacerlo en medio del cesped, menos mal que estan solo ellos que sino...JAJAJAAJAJAJA
¡Siguiente pronto! Besos, Lidia (@LidiaNesquikera en twitter) :)♥
Me encanta que subas cap de las dos historias a la vez, pero no me gusta porque tengo que hacer dos comentarios y en eso soy muy mala, bueno solo decirte que me encanta, me encanta que ella tenga miedo y él le pinche, que ella intente hacerse la fuerte pero el sepa que en realidad es una niña, bueno que me encanta y como te he dicho en la otra historia mis comentarios no son muy buenos pero aun así me esfuerzo por ponerte lo mucho que me gustan tus caps.
ResponderEliminarGracias y como no esperando el siguiente siempre.